Las carillas dentales son uno de los tratamientos más demandados para mejorar la sonrisa. Existen dos tipos principales: carillas de composite y carillas de porcelana. Aunque ambas tienen el mismo objetivo —corregir color, forma y alineación de los dientes—, presentan diferencias en materiales, duración, precio y resultados.
En este artículo te explicamos las ventajas y desventajas de cada tipo de carilla, para que puedas tomar la mejor decisión.
Las carillas son finas láminas que se colocan en la parte frontal de los dientes para mejorar su aspecto. Se utilizan en casos de dientes manchados, fracturados, con espacios entre ellos o para conseguir una sonrisa más armónica.
Dependiendo del material, se distinguen dos tipos principales: carillas de composite y carillas de porcelana.
Las carillas de composite están fabricadas con resinas compuestas, similares a las que se usan en los empastes estéticos.
Ventajas de las carillas de composite:
Desventajas
Las carillas de porcelana están elaboradas con cerámica de alta estética y resistencia. Se diseñan en laboratorio a medida para cada paciente.
Ventajas de las carillas de porcelana:
Desventajas
Las carillas de composite son más económicas, se colocan en una sola sesión y resultan fáciles de reparar, aunque su duración es menor (5-7 años)
En cambio, las carillas de porcelana requieren varias citas y su reparación es más compleja, tienen una gran resistencia y una mayor durabilidad (10-15 años).
La elección entre carillas de composite vs porcelana depende de tus necesidades:
Si buscas una solución rápida y económica, las carillas de composite pueden ser una buena opción.
Si prefieres un resultado más duradero y natural, las carillas de porcelana son la elección ideal.
En cualquier caso, lo más recomendable es realizar un estudio personalizado en nuestras clínicas dentales, donde un especialista valore cuál es la mejor alternativa para tu sonrisa.
Tanto las carillas de composite como las de porcelana son tratamientos efectivos para transformar la sonrisa. La diferencia está en la durabilidad, resultados y presupuesto.
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Las carillas de porcelana suelen durar entre 10 y 15 años, mientras que las de composite duran entre 5 y 7 años. Si buscas una opción más duradera a largo plazo, la porcelana es superior.
Las carillas de composite son más económicas en comparación con las de porcelana. Son ideales si buscas una solución estética más asequible, aunque suelen requerir más mantenimiento con el tiempo.
Sí, el composite es más propenso a mancharse con café, vino tinto, tabaco u otros alimentos pigmentados. Aunque se pueden pulir, no conservan el brillo como la porcelana.
No exactamente. Las carillas de composite pueden colocarse en una sola visita y suelen requerir menos desgaste del diente. Las de porcelana necesitan más preparación dental y al menos dos visitas.
Sí, muchas personas comienzan con carillas de composite y luego optan por porcelana. Es posible hacer el cambio, pero requerirá evaluación profesional y adaptación del tratamiento.
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